miércoles, 18 de septiembre de 2013

Temas

Es un tema fantástico, artístico, original pero como todo lo que nos rodea, incomprendido y mal recibido. Una foto es para enseñar la cara. Pues no tiene por que, el tema es grandioso: cada uno con un libro en la cara que le identifique, aunque que leamos cuatro gatos es una desventaja, la gente tarda poco en decidirse, pero ¿yo? Tan indecisa como siempre... Siempre he de ser la última en decidirse, llego hasta tal punto que por un momento pienso en coger la elegante máscara veneciana que cuelga encima de la bandera española que tiene en el cabecero de la cama, al lado de ese skate que sirve de estantería, es elegante, misteriosa y no enseña de mi más que el color de dos ojos que se ven a través de unas rendijas bordeadas por el dorado y azul eléctrico. No, li faut jouer le jeu. Nunca encontrare algo que me identifique, porque busco exactamente lo opuesto a mi cuando exploro el mundo de las letras. Desesperada, se me ocurre un último recurso: algo que me haya cambiado... Vuelvo a guardar el Faro de Alejandría, el Sanador de caballos, Río Sagrado y el escocés ese. Saco mis "cambios": fairy Oak, un libro infantil pero después de todo el primero, además sigue habiendo magia, hadas y sueños de niña pequeña, y un gran proyecto, intente hacer una obre de teatro con mis amigas sobre el libro pero soy una directora pésima y fui la única que se aprendió su parte la pequeña hada Feli, aunque la que me apasiono fue Devi, supongo que a raíz de eso vino el apodo estúpido.  Otro es cazadores de sombras: primera lágrima con un libro pero no la última, emoción y secretismo. Siguiente: La dama del Nilo, fin de la búsqueda, guardo los que aún no he mirado y los ya vistos, este es perfecto

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