-¿en serio? ¿En serio crees que necesito que alguien me explique que en el Coliseo las sentaban por debajo de los esclavos, debajo del pueblo, debajo de los hombres? ¿Crees que no se que eran una mera mercancía que se intercambiaba por una dote? He ahí su arte, su don... Leer un libro donde el hombre es fuerte, heroico y valiente es tan sólo un tópico, absurdo, idealizado, les dibujan perfectos como estatuas de mármol, blancas tersas e invencibles. En cambio, vaya ver una mujer lista sorprende... Bueno, lista no es la palabra, muchas lo eran, pero con el valor suficiente para demostrarlo. ¿Qué me dices de la reina aliada de los persas que dirigía la flota, de las duras Amazonas, primeras en domar caballos, que se enfrentaron contra los griegos en la guerra de Troya, Boudica, el ejército de hoplitas de la orden de La misión de Atenea en Esparta en tiempos romanos, la única mujer faraona, las reinas Victoria e Isabel de Inglaterra que llevaron al país a su auge, Isabel la católica? Hay tantas... Si, menos que hombres, todo hay que decirlo, pero las había y no todas guerreras, las había que luchaban por sus derechos, sus sueño, su libertad. Por eso aprecio tanto la cultura espartana, austera pero justa, la mujer tenía voz y voluntad, si, la maldita voluntad que les concede el alma guerrera y la actitud que tanto idolatro, no es coger una espada para luchar, sino utilizar el ingenio. Eran capaces de hacer sacrificios que gente como tu y como yo, como la mayoría de hombres no serían capaces de hacer. Si, me duele que ofendas así la memoria de, todo hay que decirlo, muy contadas mujeres que se comportaron de manera valiente. No digo que hay que despreciar por ello a los héroes, ellos también tenían carácter y espíritu pero no por ello eran los únicos que se merecían grandes monumentos y riquezas.
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